Luego de casi un año de haber sido declarada la emergencia sanitaria por la llegada del Covid-19 al país y hacerle frente a los momentos más críticos en los que se perdieron vidas y más de 180.000 empleos, las cifras respaldan la reactivación de la economía local.

Este martes, la Alcaldía resaltó tres ejemplos de reactivación económica, de empresarios que lograron adaptarse a las condiciones que impuso el Covid-19 desde tres perspectivas diferentes: una microempresaria del sector manufactura, Jackeline Silvera; el fundador de la panadería La Garosa, Alejandro Rodríguez, y el CEP de Teleperformance, Andrés Bernal. 

Jackie’s Design y sus nuevas unidades de negocio

Con 30.000 pesos y mucho entusiasmo, hace 19 años comenzó Jackie’s Design, negocio dedicado a la producción y venta de artículos para el hogar. Todo iba en marcha hasta que, en 2020, así como muchas empresas, se vio afectado por la llegada de la pandemia por el Covid-19.

Pero hasta en los momentos más difíciles de la pandemia, su fundadora Jackeline Silvera mantuvo su tenacidad, siempre pensando en sus 20 colaboradores, en su mayoría mujeres cabeza de hogar de estratos 1 y 2.

La esperanza llegó cuando por primera vez decidió aplicar a un crédito: la línea ‘Barranquilla Responde’, y fue una de los 2.700 beneficiarios que accedieron a este programa que desembolsó recursos por $60.000 millones para inyectar liquidez a las micro, pequeñas y medianas empresas.

Con ese dinero, además de pagar la nómina, adquirió insumos para fabricar sus nuevos productos estrella: gel antibacterial, alcohol y jabón, así como una línea de tapabocas lavables. 

Además, durante la cuarentena optimizó su línea de producción y hoy maquila para grandes empresas farmacéuticas.

Luego de un año de declarada la emergencia, Jackeline extiende una sentida invitación a emprendedores y empresarios: “A todos los que están en este camino, no tengan miedo, no desfallezcan. Miremos con optimismo todas las opciones y salgamos adelante”.

La Garosa: más que una panadería, una historia de inspiración

Para el fundador de la panadería La Garosa, Alejandro Rodríguez, la cuarentena marcó un antes y después en la historia de su empresa. Pasar de recibir cientos de clientes, quienes a diario se deleitaban con el popular ‘buqueso’ en su local, a un cierre total, fue un golpe abrupto para él y sus colaboradores.

Luego de permanecer dos meses cerrados, tomaron la decisión de innovar y hacer productos congelados para distribuirlos a domicilio. Poco a poco se fueron adaptando a la nueva realidad y para ello fue clave ‘Quilla Innova’, la convocatoria de la Alcaldía Distrital que les dio las bases para optimizar su modelo de negocio y generar más ventas con las redes sociales.

“Fue una experiencia increíble porque tuvimos mucho apoyo; nos ayudaron en todas las áreas, incluyendo finanzas y logística para organizar los espacios. Eso nos sirvió para construir una visión a largo plazo y proyectarnos hacia el futuro”, asegura Rodríguez.

Durante la cuarentena, La Garosa abrió dos locales más y hoy cuenta con sucursales en Villa Carolina, Soledad y Bogotá, las cuales generan 55 empleos directos.

Hoy Alejandro cuenta que la pandemia los motivó a fortalecerse. “Aprendimos en medio de la adversidad que siempre hay una salida para salir victoriosos. Crecimos mucho y nos dimos a conocer mucho más. Inspirar, motivar, echar para adelante sin importar las adversidades, esa es la cuestión”.

Teleperformance: sector BPO, gran generador de empleo

El 6 de marzo del 2020 abrió sus puertas en Barranquilla Teleperformance, líder en la industria BPO con experiencia en conectar a las marcas más poderosas del mundo con sus clientes. En ese momento, el CEO de la compañía en el país, Andrés Bernal, aseguró que la meta era “emplear 1.000 personas en la primera fase de operaciones”.

Seis días después, el Presidente de la República Iván Duque Márquez declaró la emergencia sanitaria en Colombia.

Pero contra todo pronóstico, en menos de seis meses superaron la meta, y a corte de hoy Teleperformance se posiciona como uno de los mayores empleadores del 2020 y que rompió esquemas con respecto a las dinámicas del teletrabajo.

Antes de la pandemia mucha gente creía que “solo se podía prestar un servicio desde las instalaciones. Pero el talento barranquillero nos ha demostrado que el rendimiento que se puede obtener desde casa puede ser igual o mejor al que estamos acostumbrados a ver”, expresa el CEO de la compañía.

Bernal también resalta las ventajas competitivas de la ciudad para alcanzar estos resultados: el ADN del barranquillero, que se enfoca en servicio y relaciones, viene como anillo al dedo para el servicio que nosotros prestamos. Además, la ciudad se ha consolidado como eje empresarial en el país, con el apoyo de las instituciones que trabajan en conjunto en una política coherente y consistente.

Finalmente, invitó a “seguir construyendo este camino entre todos, para así lograr ir a un siguiente nivel, aprovechando esta complicada situación”.